Una elástica amalgama de pensamientos, reflexiones, conclusiones, y sobre todo, imaginación.
Para muchos es mera rutina, una acción que ha de suceder un día tras otro, pero a mi, me aporta sensaciones que ninguna otra me da. No me refiero al sueño, pues de este pocas veces me acuerdo, y siempre me resulta demasiado extraño.
A lo que me refiero yo es a los momentos en los que se intenta dormir, aquellos en los que, ya en un ensoñamiento, todo empieza a encajar, y el subconsciente nos parece decir no solo que todo es absolutamente perfecto, si no que también todo lo que pueda llegar a pensar o imaginar lo es. Antes de ese punto, muchas opciones sobre acciones, y mucha imaginación sobre muchas reacciones, nos dejan ver un mundo, que despierto, es realmente difícil abarcar. Es bien sabido que justo antes de dormir, se registra gran actividad cerebral.
Sin embargo, por lo menos a mi, siempre me sucede igual, y cuando mi subconsciente llega a un determinado pensamiento, todo desaparece, y la conciencia aparece como aturdida y sin saber por qué. Y pasa una vez tras otra. Muchas veces son meras conclusiones, otras, fresas, versos, simples pensamientos o textos que, como este, logran ser, al menos en parte, recordados al día siguiente. Pero claro, esto solo que yo recuerde.
Muchas veces, es difícil controlar lo que uno piensa, puede que mucho mas de lo que todos nos imaginamos, pero nunca como en ese momento. Intenta no pensar, y estarás un rato pensando en no hacerlo, pero de poco sirve. Intenta no pensar en una cosa, y esta entrara en tu subconsciente para recordarte que no debes recordar. Como mucho podrás no pensar en ella conscientemente durante un rato. Piensa en algo durante un rato y pasara lo contrario. Recuerda, y muchos mas recuerdos te vendrán por si solos. Si puedes, piensa lo que quieras, pero piénsalo bien.